Adquisición

- Adquisición -


    ¿Recuerdas lo que dije antes de que el sentido de la responsabilidad de vosotros los humanos, puede verse reforzado a raíz de la tarea de cuidar de un ser vivo?. Pos'eso. Muchos pedagogos recomiendan que niños y adolescentes crezcan en compañía de animales. Los más pequeñajos (entre 1 y 8 años) deben recibir ayuda de adultos en el cuidado de los animales. 

    La adquisición de un roedor ha de meditarse bien y regalar uno de nosotros sin previo aviso es una acción poco acertada. 

    Dada nuestra fama y popularidad, numerosos son los ejemplares que se encuentran a la venta en los establecimientos o tiendas especializadas. Llevarnos a tu casa es, pues, sencillo, aunque hay que tener en cuenta ciertos aspectos para proceder a una buena compra del ejemplar. 

    Es necesario que mi congénere se encuentre sano y goce de una perfecta salud. Hay que fijarse también en no adquirir un ejemplar ya anciano y sin capacidad para reproducirse. Así, en el momento de comprarlo debes prestar atención a: 

- Que goce de perfecto estado de salud.
- Que sea joven y presente un aspecto vivo y animado.
- Que sus orejas estén alzadas y recubiertas de pelusilla en su interior.
- Que los ojos sean expresivos y brillantes.
- Que el pelaje sea suave y sedoso.
- Que las patas estén sanas.
- Que el tamaño se ajuste a su edad.

    A veces te pueden vender un camarada anciano que debido a su nerviosismo e inquietud te parezca un chaval. Para percatarte de esto has de saber que los ejemplares ancianos presentan las orejas brillantes y carentes de pelo en su interior. No debes adquirir nunca un ejemplar delgado al que se le marque la columna vertebral. Tampoco debes fiarte del hámster que presente el pelo chafado y pegado alrededor del ano, pues es un síntoma de poca salud. También hay que prestar atención a las patas, que no deben presentar hinchazones o contusiones, así como al pelaje, que debe ser suave y sedoso y no tener, en modo alguno, manchas o costras, ya que pueden ser posibles indicios de una enfermedad.  
- Adquisición -
(... continuación)


    Es muy importante a la hora de adquirir un ejemplar saber distinguir cuál es su sexo, ya que hay quien desea adquirir una chica o un chico por razones determinadas. De todos modos, siempre resulta aconsejable tener la parejita, dado que así ambos tenemos compañía (je, je). 

    Para saber si somos macho o hembra debes fijarte atentamente en la forma trasera que tenemos. Así, los machotes tenemos forma de pera, mientras que las nenas exhiben una forma trasera más redondeada. De todas formas, el mejor modo para saber distinguir el sexo es congiéndonos entre las manos y separándonos las patas traseras y el pelo que se encuentra entre ambas. Así no habrá duda ¿no?. Los genitales de los chicos se encuentran a una distancia de aproximadamente seis milímetros de su cavidad anal; sin embargo en las chicas es más difícil distinguirlos por estar los dos orificios muy juntos uno al otro.
Estos es una chicaHEMBRAEsto es un chicoMACHO


    Pero si aún así sigues sin saber … mejor se lo preguntas al vendedor (jajaja). 

    ¿Ya te dije que nos gusta la compañía? Podemos ser propensos a sufrir la soledad (sip, snif, snif) -en realidad, como todos los animales que se encuentran aislados de sus semejantes-. Nuestra vida en pareja en este tipo de roedor no ofrece dificultades; al contrario, todo serán ventajas, pues estaremos contentos y animados y nuestro estado de ánimo influirá beneficiosamente en nuestra salud. Peeeero …¡cuidadín! … ops … he de añadir que si se adquiere la pareja, en un principio deberemos vivir separados, bien en una jaula grande dividida por un tabique, bien en dos jaulas diferentes. Entiéndelo, todos necesitamos un poco de independencia hasta conocernos ¿no?.


No hay comentarios:

Publicar un comentario